Por una iniciativa conjunta entre la Subcomisión de Género y la Comisión Directiva del club, a partir de junio todas las incorporaciones y renovaciones de contratos que se firmen tendrán incluida, sin excepción, una cláusula por la que, si un futbolista llegare a resultar imputado en una causa penal por violencia de género, quedará automáticamente separado del plantel hasta tanto se resuelva su situación judicial. Asimismo, en el caso de que tal denuncia desembocare en una condena por parte de la Justicia, el vínculo contractual con el CASLA quedará automáticamente rescindido sin tener la institución que abonar ningún tipo de resarcimiento económico.
De esta manera, los nuevos contratos de Fernando Monetti, Jonathan Herrera y Franco Di Santo ya cuentan con dicha cláusula, la cual será incluida en todos los vínculos que vayan firmándose de aquí en adelante con el resto de los jugadores. De este modo, se siguen generando acciones concretas vinculadas a la prevención y erradicación de la violencia hacia las mujeres.